Una obra maestra táctica que quedará en la historia del Giro de Italia. Simon Yates ha calificado a Wout van Aert como el 'gregario definitivo' después de que el belga le ayudara a dar la vuelta al Giro en la etapa decisiva en Sestriere.

Van Aert, uno de los corredores más talentosos del pelotón y capaz de destacar en cualquier terreno, demostró una vez más sus extraordinarias habilidades como gregario de lujo. Tras una primavera tranquila, el campeón belga fue recuperando poco a poco su forma durante el Giro, ganando la etapa en la carretera de tierra de Siena y consiguiendo dos segundos puestos detrás de Mads Pedersen.

En la etapa reina de Sestriere, Van Aert realizó una actuación monumental: tras unirse a la escapada del día, resistió heroicamente en el Colle delle Finestre para esperar el ataque de su capitán Yates. Los dos unieron fuerzas en el descenso y en el valle hacia Sestriere, con el belga presionando fuerte, lo que permitió a Yates ganar casi cinco minutos sobre sus rivales Del Toro y Carapaz.

El belga también fue fundamental en las dos victorias al sprint de Olav Kooij en la sexta y vigésimo primera etapa con salidas perfectas, además del gran triunfo en las pistas de tierra de Siena por delante de Del Toro.